Un voraz incendio destruyó anoche las instalaciones del Rauch Auto Moto Club

Un voraz incendio destruyó anoche las instalaciones del Rauch Auto Moto Club, sin que se registraran víctimas fatales ni heridos. El siniestro se inició alrededor de las 23 horas en el interior del edificio situado en calle Rondeau al 700, a pocos metros de la avenida Belgrano.

Al parecer en el interior del club no había personas. Las puertas estaban cerradas por lo que se desconocen los motivos que habrían provocado el siniestro. Si bien anoche se barajaban algunas alternativas, no había hipótesis firmes que confirmaran las causas del incendio.

Si bien se desconoce en qué lugar del edificio se inició el foco, se sabe que el fuego rápidamente se propagó a otros sectores. En cuestión de minutos el foco ígneo se apoderó del lugar y provocó pérdidas totales. En el interior había diferentes elementos: sillas, mesas, bancos, televisores, heladeras, frezzer y vajillas, entre otros. Asimismo, documentación y diferentes recuerdos de la antigua institución. En cuestión de minutos el fuego destruyó todo.

EL TRABAJO DE LOS BOMBEROS

Poco después de las 23 al menos tres dotaciones llegaron al lugar de siniestro. Los Bomberos trabajaron intensamente hasta que finalmente pudieron controlar el foco. El fuego fue letal y en cuestión de minutos consumió todo lo que había a su paso.

Si bien oficialmente no se informó sobre las razones por las que comenzó el siniestro, algunos cercanos a la institución plantearon que existía la posibilidad que el hecho se habría originado por un cortocircuito. Nada estaba confirmado. Solo una de las tantas hipótesis que dentro del asombro tejían los integrantes de la institución.

La tarea de los bomberos en tanto demandó de varias horas. Primero controlaron las llamas. Luego realizaron tareas de enfriamiento. La Policía y los agentes de tránsito en tanto cortaron el tránsito en la avenida.

EL FUEGO, UN ARMA LETAL

La expansión de las llamas se vio favorecida por la combustibilidad de los elementos alcanzados por el fuego, como revestimientos de madera, techo y los diversos elementos que se encontraban en el interior.

Asimismo, los voluntarios tomaron precauciones para que el fuego no avanzara a las propiedades linderas. De un lado una vivienda. Del otro una panadería. Ambas propiedades fueron protegidas.

La aparición de una densa humareda y el sonido casi inmediato de las sirenas conmocionaron al barrio.

 

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