El fallecimiento de María Elena Pontiggia generó pesar este viernes en la comunidad. Integrante de una familia tradicional de Rauch, Mariel -como la conocían familiares y amigos- se casó con Delfor González. Tuvo cuatro hijos: Marcos –fallecido- Catalina, Dionisio y Camilo González.
Su vida transitó en la zona rural, en el campo familiar de Colonia “El Albardón”, donde residió hasta su última etapa. Allí surgieron sus inquietudes relacionadas con la permanencia de las familias en la zona rural y las obras necesarias para el desarrollo productivo del principal motor económico del país.
Sus pensamientos se transformaron en ideas y propuestas que supo capitalizar con su participación política y su militancia en las filas del Partido Intransigente.
Fue una mujer activa, curiosa e inquieta. Trabajadora incasable de las buenas acciones, de trato amable y corazón abierto.
Su partida generó resignación entre quienes no contarán con su presencia física, si bien su legado continuará.
María Elena Pontiggia fue dirigente histórica del PI y una de las principales referentes del centro izquierda, hecho que le permitió acceder a una banca en el Concejo Deliberante de Rauch en representación de la Alianza por el Trabajo, la Justicia y la Educación.
Fue la fuerza política que surgió del acuerdo entre partidos políticos –entre ellos la UCR- en 1999 y que llevaron a Fernando De la Rúa a ser presidente de la República Argentina y a Jorge Petreigne intendente de Rauch.
Mariel compartió banca con Susana Amespil, Joe Rocco, Julia Larroude, Mario Ibargoyen y Héctor Balbuena, entre otros.
Su paso por el Recinto no fue en vano. Hizo contribuciones desde su lado más inquieto relacionado con el campo.
“Para mi Mariel fue una amiga entrañable. Una compañera con el que coincidíamos en casi todas las cosas. Nos conocíamos de hace mucho tiempo. Siempre coincidiendo en casi un 100 por ciento de las cosas. El mejor respeto y cariño es describirla como fue. Una mujer con una muy buena formación”, dijo el ex legislador del socialismo en Tandil Oscar Martens, con quien tuvo un estrecho vínculo de amistad.
“Mariel era referente del campo. Desde su militancia en Federación Agraria y Mujeres Agrarias. Siempre tuvo una visión del tema agrario muy amplio”, le dijo Martens a LA NUEVA VERDAD DE RAUCH al recordarla.
En el ámbito de la política –agregó Martens- “la recuerdo de épocas fuertes del PI, en épocas de “Maneco” Aramburu, de largas convenciones y de mucha discusión política”.
“Mariel tuvo una visión política progresista. Para mí se fue una amiga y me queda el enorme recuerdo de una mujer con un gran compromiso político”, cerró.
Los restos de Mariel Pontiggia fueron velados en Casa Julio Palmieri e Hijos e inhumados en el Cementerio Municipal de Rauch este viernes.
