En mayo de 2016, mediante una carta abierta a la comunidad, el doctor Pablo Otegui había explicado el caso que por entonces investigaba la Justicia.
En su mensaje a la sociedad hacía referencia al episodio por el que ahora fue inhabilitado, aclarando los pasos dados por la Justicia por entonces y descartando de que haya existido “mala praxis” en sus intervenciones.
LA CARTA ABIERTA DEL DOCTOR OTEGUI EN 2016
«En estos momentos en los que el pueblo, mi pueblo al que pertenezco desde hace 50 años, se encuentra involucrado en un debate sobre hechos y acontecimientos que permiten las más diversas interpretaciones y que conllevan a la emisión de juicios tanto a favor como en contra de mi persona, creo que es tiempo oportuno de elevar a todos los medios esta nota que intenta echar luz a erróneas afirmaciones.
A fines de marzo de 2004, y como consecuencia de un acto quirúrgico que efectué por guardia en el Hospital Santamarina, se inició una causa en contra del equipo quirúrgico actuante.
En una primera oportunidad, el propio fiscal que inicialmente comienza la causa desestima que hubiese habido mala praxis.
En una segunda oportunidad, en el año 2006, se inicia una demanda civil y reapertura de la misma causa, siendo absueltos en forma definitiva tanto el Dr. Diez como yo en el año 2009.
De lo expuesto, queda claro que, para la propia justicia y en dos trámites distintos para el mismo caso, no existió MALA PRAXIS quedando, INSISTO, ABSUELTO.
Continúo con una causa por falsedad ideológica de instrumento público, es decir que se me imputa no haber dejado constancia de lo que nosotros NO VIMOS. Es decir, la última acusación que se me hace es por no poner en un documento público, como una historia clínica, un dato que al momento del examen médico no se manifestó.
Esta causa fue a juicio oral en febrero de este año y el tribunal actuante en primera instancia me encontró culpable. Esta medida, que me afecta en lo personal y como médico, aunque puedo seguir ejerciendo la profesión y no me inhabilita para ocupar cargos públicos, ya fue apelada y no resta más que esperar.
El objetivo de estas palabras es acercar claridad en tiempos de confusión, muy especialmente a aquellas personas que asisto desde hace tantos años. Agradezco infinitamente las expresiones de apoyo y solidaridad recibidas, tanto de la población en general como de mis colegas, que aportan las energías para seguir adelante con el ejercicio de mi profesión, como lo he hecho en estos largos años desde que esto inició. Tengo, además, la convicción de mi buen accionar y la paz espiritual de haber hecho lo correcto”.
Respaldo del Circulo médico
En mayo de 2016 el Círculo Médico de Rauch emitió una solicitada, en donde manifestó respaldo al Dr. Pablo Otegui en medio del proceso judicial por el hecho acontecido en 2004 en Tandil.
La entidad que agrupa a los profesionales médicos -con la firma por entonces de los doctores Juan Alberto Davancens y Daniel Aizpurúa– cuestionaba la decisión del Tribunal por haber imputado al Dr. Otegui «en apariencia con bases técnicas y científicas muy poco sólidas».
Además, descartaba la posibilidad de que el médico rauchense hubiera incurrido en “Mala Praxis” en el caso en cuestión.
Esta es la justicia del país en q vivimos. No dejan trabajar a quienes nos cuidan, en quienes confiamos, a quienes conocemos desde siempre, y abren la puerta y dan cancha libre a quienes no nos dejan vivir, a quienes nos golpean, nos matan, nos amenazan.
Con qué derecho nos privan de la atención y cuidado de personas de bien, qué han estado siempre a nuestro lado y q nos han salvado más de una vez…?
Esta reflexión es solo una faceta . Lo que concierne a los pacientes del Doctor. Quiero resaltar que el daño q se causa no termina con la decisión q se tomó afectando al doctor, en lo personal y en lo profesional, sino q perjudica a numerosas personas, que nos sentimos sumamente dolidos, privados del derecho.de elegir el profesional q se hace cargo de nuestra salud. Destruída nuestra confianza, tirada por la borda toda la historia de nuestra salud y la comunicación afectiva, solo queda por decir:
Esto es todo lo q saben hacer, señores y señoras de la justicia? Qué corta es a veces la mirada sobre la realidad!